Trucos para Conseguir el mejor efecto con Exfoliante Facial
Contaminación, edad, estrés, frío, un cuidado deficiente. Mil factores pueden llevarnos a poseer una piel deshidratada, con aspecto áspero, reseco y sin vida. La exfoliación es un paso esencial para exhibir una piel sana y luminosa, que regenere sus células naturalmente. ¿Cómo utilizar los Exfoliantes Faciales para obtener un mejor efecto? A continuación te lo indicamos.
Hidrata siempre después de exfoliar
La piel queda expuesta y vulnerable tras una exfoliación. Para protegerla mientras se regenera de forma natural, lo ideal es usar productos hidratantes que la mantengan cubierta contra la acción de agentes externos así como de agrietarse o enrojecerse por la falta de líquidos. Recuerda, usar una mascarilla hidratante es MUY recomendable siempre tras una exfoliación.
Evita exfoliar a menudo
Aunque el exfoliado es completamente necesario para limpiar la piel en profundidad, no debe hacerse continuamente. Al alterar el pH natural de la piel, podemos provocar el efecto contrario al deseado: aparición de impurezas, irritaciones y rojeces. En el caso de las pieles grasas, puedes exfoliar tu rostro una vez a la semana. En las pieles secas, bastará con una vez cada quince días. Estos descansos son necesarios para darle tiempo a la regeneración celular y favorecer la limpieza natural de los poros.
Elige exfoliante según tu tipo de piel
Existen distintos tipos de exfoliantes faciales para todos los tipos de pieles. Pieles grasas, mixtas, secas, sensibles, castigadas, ancianas.... elige el exfoliante facial que mejor se adapte a las características de tu piel.
Usa una buen técnica de aplicado
¡No uses esponjas ásperas! Mejor las de textura suave. Tras ello, puedes masajear el rostro despacio, de manera circular y siempre de arriba hacia abajo. Favorecerás la microcirculación sanguínea y penetrarás en las capas más profundas, obteniendo un resultado alucinante y evitando las irritaciones y rojeces.